Sólo se crece una vez

Le ha dolido, esa frase le ha dolido.

Pero lo que importa es que tú no te lo crees, no lo compartes. ¿Entiendes? Tienes que tener y ser de criterios propios. Sólo se crece una vez, o eso es lo que nos ha dicho el Nesquik, ¿te acuerdas?. No caigas ahí, no caigas tan bajo, no te compares con él, no entres en el juego, no te aisles con la envidia; levántate, con prudencia, con cuidado, con la satisfacción personal de no darles el placer de ganar la batalla. Es tu vida, no la suya, y eres tú la que tiene que llevar sus riendas. Sé avispada, utiliza esa frase para revelarte contra ella y no dejarla entrar, para ni siquiera dejar que te roce, para alejarla, para no parecerte a esos enseres genéticos. Saca lo mejor de las personas, y aparta lo peor, sé una esponja sólo de lo bueno. Y te entiendo, que la paciencia se acaba, pero que te cierren la puerta de mal modo, y que te dé igual. Son frases inyectables, que se transmiten de oreja a oreja e intentan jugar contigo y subirte por la espalda, para luego confundirte y tirarte de espaldas. Y es ahí donde tú juegas tu papel, donde lo mantienes, lo eliges, y lo proyectas. Te expandes y escalas el Pico. Si tu raíz está extendida por España, por algo será. No sólo los escaladores vuelan, tú también.