Que no soy de sotas, sino de caballos

Yo no sé si no te importa y abrazas la indiferencia. Si aguantas así. Si las llaves y sus voces no te molestan y las horas son eso para ti. Si entiendes así las cosas o prefieres que no se queden ahí. Si un tal vez se queda sin cuerda y la acción cae para que tus manos luego no la levanten. Tal vez, tal vez seas aún más independiente que yo. Que tus manos luego no la levanten. O si. por el contrario, tienes ases guardados en tu manga seca, para luego sorprenderme y engañarme para bien. Pero que sea para bien. Y que haya más de cuatro ases en tu baraja. Que la sota tire al basto, y se suba a lomos del caballo. Coger tú una rienda, y yo la otra, formar nuestra propia baraja, baraja de nueve partidas.

Que la sota tire al basto, y se suba a lomos del caballo.