Por no callarse ya

¿Qué le has hecho? Que de casi dos horas al teléfono más de una y media ha hablado de ti. Que después de tantos días no se acuesta si no es pensando en ti. Que no me ha parado de hablar de vuestras recientes coincidencias, de tus gustos, de tus colores. Que le tienes perdido, y a la vez asustado. En una nube, y con miedo a caerse de nuevo de ella. A caerse de bruces. Que no sabe lo que pasará, pero que le gusta sin más. Que va con cuidado, con pies de plomo, pero que quiere más y más. Que no se plantea un puente de octubre si no es contigo. Que se preocupa por tus pensamientos e inquietudes. Que le he tenido que colgar por no callarse ya.