Quiero llegar a un punto en el que sonría como lo haces tú

Es raro tío. Es raro escribir a la gente después de meses. Leerles desde lejos. Saber que siguen ahí y que sigues ahí haya habido más o menos contacto. Es jodido no haber dado señales. Pero te entiendo. Te comparto. Y es algo que mejoraremos con el tiempo.

La gente sigue ahí aunque tú hayas estado más distante. Si es tu gente, sigue ahí.

Duros meses.

Meses luchados.

Meses ganados.

Meses avanzados.

Quiero llegar. Quiero llegar a un punto en el que cuando escriba a mi gente desde lejos sea capaz de sonreír y de demostrar ese cariño a través del texto, como lo estás haciendo tú ahora en frente de mí. Quiero llegar a un punto en el que sonría como lo haces tú. Pero la emoción también es comprensible, sentida, y sobre todo, sincera al ser humano. Déjate sentirla también.

Quiero. Quiero mejorar el silencio un día. Preocupe o no…También hay que dejarse dar preocupación y sensación.

Quiero seguir formando parte de mi gente.

Y estáis aquí, en la casa de Inglaterra mientras escribo esto días antes de leerlo. Y estáis aquí, en un bar de Poznań mientras os leo esto.

No te vengas abajo. Lo has hecho lo mejor que has podido.

Lo que es la vida. En frente de él, un año por delante de mí viviendo aquí. Dónde estaré yo dentro de un año. Lo que es la vida.

La gente sigue ahí.

…

Laura, Ania, Julito, Leticia, Bárbara, Ari, Torrano, Alexis, Antoñita, Chichi, Coke, Dad, Toñi y el resto de la familia, Sole, Moyi, Rebo, Vero, Tortu, Héctor, Kuku, Elisa, los y las sentidas.

Forman parte de esa gente.

Y a los nuevos, Javi, Claudia, Jaime, Curro, Abidan, Beatrice, Pawel, Hanna.